Estrés parental en familias con niños autistas
La crianza de los hijos puede ser una experiencia estresante para cualquier familia, pero puede ser especialmente desafiante para aquellos con niños autistas. Los padres de niños autistas a menudo enfrentan luchas únicas que causan estrés adicional en el trabajo y en el hogar. Desde comprender las necesidades de su hijo hasta encontrar los recursos adecuados, los padres a menudo se sienten abrumados por las presiones adicionales de criar a un niño autista.
Este artículo explorará las causas y los efectos del estrés de los padres en familias con niños autistas, y también brindará consejos y estrategias para ayudar a reducir este estrés.
El Estrés en la salud mental de las familias
Adhiriendo a la concepción de R. Lazarus y Folkman (1986) consideran el estrés como “una relación particular entre el individuo y el entorno que es evaluado por éste como amenazante o desbordante de sus recursos y que pone el peligro su bienestar”.
Abidin (1990) habla sobre el estrés parental haciendo referencia a la reacción del individuo ante una situación que le provoca tensión o malestar en función de la crianza, la cual puede originarse a partir de las características del hijo, las características del padre y/o madre y las características del vínculo o interacción entre padre-madre/hijo.
Ser padre de un niño con autismo puede ser una experiencia estresante para las familias. El estrés de manejar las necesidades únicas de los niños autistas, tanto en el hogar como en el lugar de trabajo, puede afectar a los padres y cuidadores.
Por eso, es importante comprender las fuentes del estrés de las familias, los padres y cuidadores pueden comenzar a desarrollar estrategias efectivas para manejar mejor sus propias emociones mientras brindan apoyo a sus hijos. Ayudar a un niño con trastorno autista a desarrollar habilidades y disfrutar de ciertas actividades es un trabajo difícil que lleva mucho tiempo. Esto, unido a la crianza de otros hijos, parece una hazaña imposible.
Las familias necesitan descanso y relajación
La solución es organizar una rutina para que cada miembro de la familia tenga una parte justa de atención de los padres. Los padres no deben olvidarse de si mismos al establecer los horarios; necesitan algo de descanso y relajación fuera de la familia, para conservar su sentido de la proporción. Si los horizontes se limitan exclusivamente a la vida diaria del niño con autismo, nadie obtiene ningún beneficio, y menos el niño.
La unión dentro de la familia es un factor esencial para llevar adelante con éxito las fatigas de criar a un hijo con un trastorno autista. Las buenas relaciones familiares tienen un efecto beneficioso en la conducta del niño, en parte porque cualquier niño es más feliz y más fácil de manejar dentro de una familia unida, y en parte porque un control adecuado de la conducta difícil requiere un enfoque coherente de ambos padres, que se deben apoyar uno al otro en las decisiones delante del niño y reservar las preguntas y las deliberaciones sobre los métodos para cuando estén solos.
Referencias Bibliográficas
Basa, Julieta Anabel. Estrés parental con hijos autistas : un estudio
comparativo. (https://repositorio.uca.edu.ar/bitstream/123456789/578/1/doc.pdf)